Zamora no se hizo en una hora... y merece la pena saber por qué. Aquí se pueden ver algunas cosas de las que Zamora ofrece, desde iglesias del siglo XII, miradores sobre el Duero, visitas de fachadas modernistas o rutas de tapas de alta cocina. Para empezar, os dejamos un artículo de Carlos Herrera que dice que Zamora bien vale un paseo... (además se habla de la Iglesia de San Ildefonso y del restaurante donde vamos a comer, remodelado por el arquitecto Paco Somoza).
Turismo Religioso
Zamora es la ciudad Europea con mayor cantidad de monumentos románicos por metro cuadrado de Europa. Solamente en el casco antiguo hay 14 iglesias, la mayoría de las cuales se pueden ver dando un paseo desde Santa Clara, la calle principal, hasta la Catedral, todo recto para no perderse. La iglesias suelen estar abiertas y son visitables.
Comienza el paseo en la Plaza Mayor, puerta de acceso a la ciudad medieval, a un lado los soportales, al otro la iglesia de San Juan de Puerta Nueva, en cuya portada sur se halla el rosetón más elegante del románico zamorano y cerrándola los dos ayuntamientos. |
Junto a la iglesia, está el monumento al Merlú, la pareja de congregantes que, mediante el toque de un tambor destemplado y una corneta con sordina, avisan a los demás hermanos para que asistan a la procesión (hermandad de Jesús Nazareno) |
A partir de ahí empieza el paseo por la calle Ramos Carrión, que se abre hacia la derecha con la plaza de Viriato:
Viriato fue el principal caudillo de la tribu lusitana que hizo frente a la expansión de Roma hasta el año 139 a.C. Las fuentes parecen indicar que nació en un pueblo de la actual Zamora. De esa época proviene también la bandera de Zamora (conocida como la "seña Bermeja"). Cuentan que tras cada victoria, Viriato arrancaba un jirón rojo de las enseñas de los vencidos y las iba ensartando en su lanza. Posteriormente a esta bandera se le añadió una franja verde, entregada por los Reyes Católicos en agradecimiento por la ayuda que los zamoranos prestaron en la batalla de Peleagonzalo (1476) contra Juana "La Beltraneja" y que asentó a los Reyes Católicos definitivamente en el trono. Por cierto, esta escultura tan típicamente zamorana es un préstamo del museo del Prado... :) Y quien siguiera "Hispania" ya se sabe toda la historia de Viriato. |
En esa misma plaza está el Palacio de los Condes de Alba y Aliste, que es el Parador de Zamora. Es muy recomendable entrar en cualquier momento a ver el patio y las vistas de Zamora desde la cafetería, aunque si es de noche, el patio iluminado es aún más bonito. Unos pasos más adelante y a la izquierda se abre una pequeña plaza. Allí está la iglesia de San Cipriano y uno de los mejores miradores sobre el Duero. Desde allí también se puede ver la chimenea de ladrillo que pertenece al hotel nh Palacio del Duero (¡el nuestro!) |
Continuando con el paseo llegamos a la Iglesia de La Magdalena (una de mis favoritas, a mano derecha), con un arco en la entrada en el que hay que pararse a buscar al obispo entre todas las figuras que forman las filas. Premio para el que lo localice (y no sea Zamorano). |
Un poco más adelante, la calle se bifurca. A la izquierda está la iglesia de San Ildefonso, (la nuestra) pero si seguimos por la derecha, que es la rúa de los Francos, llegamos a la Catedral.
La Catedral de Zamora, dedicada a El Salvador, se inscribe dentro del denominado Románico del Duero, distinguiéndose por ser la más pequeña y la más antigua de las once de la comunidad. Fue declarada Monumento Nacional en 1889. Su planta es de cruz latina con tres naves de cuatro tramos, las laterales con bóveda de arista y la central de crucería simple. Los tres ábsides que tenía en origen fueron sustituidos por una cabecera gótica en el siglo XVI.
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En el crucero se alza un cimborrio con un tambor de 16 ventanas sobre el que se levanta una cúpula de gallones revestidos con escamas de piedra y soportada con pechinas de clara influencia bizantina. Es el elemento más llamativo, bello y original del templo, y un verdadero símbolo de la ciudad.
Hay que destacar también el coro, que fue construido entre 1512 y 1516 por Juan de Bruselas. La sillería del coro destaca por la abundancia de temas de carácter profano: escenas basadas en fábulas, proverbios, refranes, mitología y también de la vida cotidiana. La torre del Salvador, de 45 m de altura, se construyó a lo largo del siglo XIII aunque el estilo es románico. En tiempos debió de estar almenada. Sirvió hasta el terremoto deLisboa como cárcel del Cabildo.
Desde el claustro se accede al Museo Catedralicio, que alberga una importante colección de tapices.
Turismo Modernista
Zamora cuenta con un total de 19 edificios modernistas que datan en su mayoría de principios del siglo pasado, coincidiendo con una época de expansión de la ciudad propiciada fundamentalmente por el desarrollo de la industria harinera, cuyos beneficios impulsaron la construcción. La asociación de La Ruta Europea del Modernismo se constituyó en el año 2000 en Barcelona, con el objetivo de encontrar mecanismos útiles y eficientes para la protección y difusión del patrimonio modernista mundial. Hoy está integrada por 58 ciudades y 49 instituciones de todo el mundo, entre ellas las de Barcelona, Bruselas, Budapest, Glasgow, Moscú, París, Buenos Aires, la Habana o México. En España además de una amplia representación de ciudades catalanas la integran Melilla, Astorga, Comillas, Ferrol y a partir de ahora también Zamora. Más información sobre el modernismo en Zamora, y el listado de edificios, aquí |
De cualquier manera, os dejo dos enlaces con dos rutas más completas y mejor documentadas, incluso podéis seguirlas con un recorrido por GPS:
Turismo Gastronómico
Zamora es una gran ciudad para disfrutar de buenos vinos y a la vez muy buenas tapas. Aviso, en Zamora las tapas se piden y se pagan aparte. En esta parte os dejo tres zonas de tapas, dos más tradicionales y una de tapas muy elaboradas e innovadoras.
Zona 1: Al principio de Santa Clara, a mano izquierda salen unas calles, con los bares "Los Abuelos" como más importantes.
Zona 2: Alrededores de la Iglesia de San Juan de Puerta Nueva, en la Plaza Mayor, está "Los Caprichos de Meneses", con tapas exquisitas. Un poquito antes de la Plaza Mayor, merece la pena hacer una parada en el Viriato (c/Viriato) y en el Horno, a probar la jeta. Junto a la zona 2 en la calle de la Reina, hay una sidrería, la Manzana Verde, donde los cocineros zamoranos lo hacen genial... :)
Zona 3: De la misma Plaza Mayor, sale la calle de Los Herreros, que es la más tradicional para tomar vinos